Boletín del 19 de Julio del 2015

BIENVENIDOS

BOLETÍN INFORMATIVO

Domingo 19 de Julio del 2015

EDITORIAL

Pastor Rodolfo Bautista

Una realidad a la que cualquier familia nos enfrentamos, es ese momento en el que el sistema familiar, empieza a tomar nuevas formas y nuevos proyectos.

Llega el tiempo en el que los hijos se tienen que ir y formar su propia familia.

Lo que normalmente hacemos para calmar la angustia que provoca la separacion, es postergar el inicio de una nueva familia o la partida de los hijos en busca de sus sueños.

¿Que provoca todo esto en el individuo?

Codependencia, inseguridad, baja autoestima y la incapacidad de vivir la vida adulta.

La Biblia nos enseña de una manera sabia, que una responsabilidad que tenemos en la vida, es la de honrar a nuestros padres. Sin embargo es un concepto que se ha mal usado, para ejercer control y poder, sobre la vida de los hijos.

La manera de honrar a nuestra familia de origen es trascendiendo. Esto significa una vida llena de fruto y de servicio al prójimo.

¿Te has dado cuenta que mucho de nuestra manera de ser tiene que ver con nuestra formación en casa, llevándola con nosotros como un modelo poco sano en nuestras relaciones de adultos?

De hecho podemos decir que el propósito de la familia es prepararnos para la vida.

Honra a tu familia y a tus padres poniendo al servicio lo que

ellos te dieron y enseñaron, siendo de bendición en tu generación.

No los culpes, no te quedes atorado y no los juzgues.

Ahora es tu tiempo. ¡Actúa, que tu público te espera!

SERMÓN DOMINICAL

Trascender para Honrar a mi Familia

Serie: Familias Exitosas

Introducción: Tarde o temprano, llegaremos a una realidad, en nuestra vida familiar. El momento en el que tenga que dar paso a un nuevo sistema. En otras palabras, el momento en el que como adulto, tendré que hacerme responsable de mi vida y decisiones, respondiendo a la pregunta ¿Para qué estoy aquí?

La historia de fracaso y dolor de muchas personas tienen un común denominador: Viven culpando a sus padres de lo que ahora son, enganchados en una codependencia con ellos.

¿Cuáles son las conductas de una codependencia familiar?

Sentir culpas por el éxito personal
Culpar a los padres de nuestros fracasos
Incapacidad emocional para salir del nido
Una dependencia para que los padres nos resuelvan nuestra vida emocional y financiera
Estar ligados por “lealtades inconscientes” con el sistema familiar

Todas estas conductas inhiben el crecimiento y desarrollo personal, incluso la relación con Dios, con quien tarde o temprano debemos de tener un encuentro personal.

Vayamos a la Palabra fuente de toda sabiduría.

Desde luego este “destete” es algo que se debió de ir formando con la educación que recibimos de los padres. “Instruye al niño en su camino y aún cuando fuere viejo no se apartará de él”

(Proverbios 22:6)

La formación de los padres a los hijos es para:

Resaltar sus talentos
Para guiarles por medio de valores
Para mostrarles el camino de Dios

El recurso que los padres usan para no dar una formación como la antes mencionada, es el miedo que introyectan en los hijos para ejercer control y poder.

Honrar mi sistema familiar, tiene que ver con descubrir la misión de Dios en mi vida. Veamos una historia interesante en la biblia

“ Aconteció que al cumplirse el tiempo, después de haber concebido Ana, dio a luz un hijo, y le puso por nombre Samuel, diciendo: Por cuanto lo pedí a Jehová. Después subió el varón Elcana con toda su familia, para ofrecer a Jehová el sacrificio acostumbrado y su voto. Pero Ana no subió, sino dijo a su marido: Yo no subiré hasta que el niño sea destetado, para que lo lleve y sea presentado delante de Jehová, y se quede allá para siempre. Y Elcana su marido le respondió: Haz lo que bien te parezca; quédate hasta que lo destetes; solamente que cumpla Jehová su palabra. Y se quedó la mujer, y crió a su hijo hasta que lo destetó. Después que lo hubo destetado, lo llevó consigo, con tres becerros, un efa de harina, y una vasija de vino, y lo trajo a la casa de Jehová en Silo; y el niño era pequeño. Y matando el becerro, trajeron el niño a Elí. Y ella dijo: !!Oh, señor mío! Vive tu alma, señor mío, yo soy aquella mujer que estuvo aquí junto a ti orando a Jehová. Por este niño oraba, y Jehová me dio lo que le pedí. Yo, pues, lo dedico también a Jehová; todos los días que viva, será de Jehová. Y adoró allí a Jehová. “

(1 Samuel 1. 20-28)

Honrar mi sistema familiar, es perpetuar la fe en Dios El gran error que estamos cometiendo en esta generación, es que hemos hecho a un lado nuestra tarea espiritual. Quiero mencionarte dos grandes errores que estamos cometiendo:

No queremos presionar a los hijos como a nosotros nos presionaron
Pensar que estamos saturados de Dios y que no queremos saturar a los hijos

La consecuencia de esto, es que nuestros hijos están creciendo sin bases morales y espirituales. Déjame te enseño bíblicamente un retrato de la sociedad actual. (Romanos 1: 21-32).

Honrar el hogar significa seguir con los principios inamovibles de Dios para nuestra conducta: “Porque tengo presente la fe sincera que hay en ti, la cual habitó primero en tu abuela Loida y en tu abuela Eunice y estoy seguro que en ti también” (2 Timoteo 1:5)

Mi exhortación en este día, es que asumamos la responsabilidad que en la vida nos toca, y que puedas honrar a tu familia y darle gracias por lo que ellos enseñaron a tu vida. Trasciende que es la única manera de agradecer lo que Dios nos dio.

Dios te bendiga